LO QUE NUNCA PREGUNTASTE SOBRE LA LIBIDO FEMENINA
En un principio, la libido estaría relacionada con el estatus hormonal, es decir, a mayor cantidad de estrógenos y testosterona, mayor libido. Por esa razón, a partir de la menopausia la libido podría disminuir respecto a edades más jóvenes.
Además, las hormonas también varían según la fase del ciclo menstrual en la que nos encontremos. De esta forma, la libido es mayor durante la ovulación y menor durante la menstruación. A su vez, las mujeres que están en periodo de lactancia también tienen una libido menor debido al aumento de prolactina (hormona que estimula la secreción de leche y que interviene en el ciclo ovárico), mientras que, durante el embarazo, como aumentan los estrógenos, es mayor.
También hay otros factores no hormonales, como determinados fármacos (los antidepresivos, antihipertensivos, el litio, etc.), el alcohol y las drogas, que pueden producir un descenso en la libido.
Tampoco hay que olvidar los factores psicosociales. Algunas personas, debido a su escasa educación sexual y al tabú que conlleva, pueden sufrir falta de confianza y pueden ver afectada su relación con el sexo. Por otro lado, los problemas personales, con la pareja o la falta de comunicación pueden reducir también la libido en la mujer.
Por último, hay enfermedades físicas o problemas mentales que pueden afectar al estado de ánimo y que están relacionados directamente con la disminución de la libido, como puede ser el insomnio o la sequedad vaginal.
¿CÓMO AUMENTAR LA LIBIDO?
“Existen varios fármacos en el mercado que combinan diversos productos naturales para conseguir un aumento de la libido femenina, como la Ashwagandha o la Maca Andina. Estos productos deben tomarse de forma continua para conseguir su efecto. Además de los medicamentos ytratamientos hormonales para incrementar el deseo sexual, que deben ser recetados por un médico especialista, hay otros tratamientos como lubricantes e hidratantes vaginales, el láser de CO2 o la inyección de Ácido Hialurónico, que pueden mejorar la vascularización en la zona genital y por tanto la estimulación y el orgasmo”, confirma Belén Gómez.
El apoyo psicológico, la terapia de pareja, una buena alimentación, hacer ejercicio y el descanso nocturno pueden ayudar a mejorar la libido en algunas circunstancias.
Cuidar la zona íntima femenina para no tener molestias y sentirse bien también es imprescindible, ya que “a partir de la menopausia la disminución en el colágeno y el trofismo de los tejidos vaginales pueden alterar el estado de ánimo. Además, los genitales son un área muy delicada a cualquier edad y tienen un pH distinto al del resto del cuerpo, por lo que hay que utilizar un gel específico para la zona íntima, ya que los geles de ducha pueden agredir el ecosistema vaginal. En cambio, un gel de higiene íntima tiene un pH más ácido, con agentes limpiadores más suaves y además está testado bajo control ginecológico”afirma la Dra. Gómez
Chilly, la marca líder en higiene íntima con un diseño fresco y juvenil, ha incorporado una nueva variedad, Chilly Calmante. Tanto el gel como las toallitas de esta variedad son de uso diario y están dedicados al alivio de las pequeñas molestias íntimas diarias, como picores o ardores. Este lanzamiento está enriquecido con Bisabolol, un agente dermocalmante que proporciona una agradable sensación de suavidad con su fórmula antimolestias. Además, está potenciado con una molécula “anti-odor” que ayuda a neutralizar el olor gracias a su acción antibacteriana. Posee un pH 5, que ayuda a mantener el equilibrio del ecosistema vaginal y respeta la fisiología natural de las mucosas genitales externas y de las zonas cutáneas que las rodean, estando siempre testado bajo control ginecológico.