Dispositivos móviles en menores de edad: ventajas y desventajas por BRAINS NURSERY SCHOOLS
En la actualidad, la presencia de dispositivos móviles entre los jóvenes ha experimentado un aumento significativo. Desde edades tempranas, los niños interactúan con smartphones y tablets, generando dudas y preocupaciones en los padres y maestros.
Vivimos en una sociedad cada vez más conectada, donde la tecnología desempeña un papel crucial en la vida cotidiana. Desde juegos educativos hasta aplicaciones de entretenimiento, los dispositivos electrónicos se han convertido en herramientas de la vida diaria, incluso entre los niños en edad preescolar. La accesibilidad a la tecnología ha creado una nueva dinámica en la crianza, planteando preguntas sobre cómo equilibrar el uso de dispositivos móviles y el desarrollo saludable de los niños.
Es fundamental comprender cómo la tecnología impacta en el desarrollo cognitivo, emocional y social de los niños. A lo largo de los siguientes apartados, abordaremos los beneficios educativos, las preocupaciones sobre la salud, la gestión del tiempo de pantalla y la importancia de establecer límites claros.
Ventajas del uso de dispositivos móviles en menores
Hoy en día, el acceso de los niños a dispositivos móviles presenta una realidad compleja, marcada por ventajas que merecen reconocimiento y consideración. Aunque existen desventajas como el tiempo prolongado de exposición a las mismas, es crucial explorar los aspectos positivos que estos dispositivos pueden aportar al desarrollo de los más pequeños.
En primer lugar, su uso adecuado ha demostrado ser beneficioso para ciertos aspectos del desarrollo cognitivo y emocional de los niños. Los dispositivos móviles no solo entretienen, sino que también sirven como herramientas educativas poderosas. Algunas aplicaciones educativas pueden mejorar la concentración, estimular la resolución de problemas y contribuir al desarrollo de habilidades motoras finas. Esta interacción digital puede ser un complemento valioso para el aprendizaje tradicional, brindando oportunidades de exploración y descubrimiento de manera interactiva y atractiva.
Además, aplicaciones y plataformas en línea ofrecen contenido adaptado a las necesidades individuales de cada niño, promoviendo un aprendizaje más personalizado y autodirigido, permitiéndoles explorar a su propio ritmo.
Por otro lado, su uso supervisado fomenta la independencia al permitir que los niños exploren de manera guiada el mundo digital. Aprenden a utilizar estas herramientas de manera responsable, adquiriendo habilidades tecnológicas y digitales valiosas, esenciales para el futuro.
A su vez, las funciones de localización y comunicación instantánea brindan a los padres la tranquilidad de saber dónde se encuentran sus hijos en todo momento. Esto no sólo mejora la seguridad física, sino que también establece una conexión constante entre padres e hijos, permitiendo una respuesta rápida ante cualquier situación inesperada.
En el ámbito de la comunicación, estos dispositivos estrechan los lazos familiares cuando la distancia física está presente. Facilitan la conexión entre padres e hijos a través de videoconferencias y mensajes instantáneos. Esta interacción digital contribuye a fortalecer las relaciones familiares y proporciona a los niños un medio para expresar sus pensamientos y emociones.
En resumen, los dispositivos móviles, cuando se utilizan de manera responsable y supervisada, pueden actuar como herramientas que no sólo empoderan a los niños para explorar su entorno digital de manera segura a la vez que aprenden, sino que también proporcionan a los padres una herramienta valiosa para mantener la seguridad y fomentar la independencia de sus hijos.
Desventajas del uso de dispositivos móviles en menores:
Aunque los dispositivos móviles ofrecen beneficios, no podemos pasar por alto las desventajas que su uso indiscriminado puede acarrear en el desarrollo y bienestar de los niños. Estas desventajas abarcan desde posibles riesgos físicos hasta desafíos emocionales asociados con el acceso descontrolado a la tecnología.
La exposición prolongada a pantallas puede contribuir a problemas de sueño, fatiga visual y sedentarismo, afectando a su bienestar general. Este exceso de exposición hace que se disminuya el tiempo dedicado a las actividades físicas y sociales esenciales para el desarrollo infantil. Además, el acceso sin restricciones a internet aumenta la posibilidad de que los niños se encuentren con contenido inapropiado, desde material violento hasta interacciones no seguras en línea o incluso que puedan sufrir ciberacoso. Además, sobre todo en edades prescolares, el uso de pantallas puede interferir con su capacidad para concentrarse, procesar información y desarrollar habilidades de resolución de problemas, ya que el contenido en pantalla a menudo es más estimulante y rápido.
Para poder prevenir estos riesgos, los padres deben adoptar un papel activo. Es crucial que se establezcan límites claros en cuanto al tiempo de uso de pantallas, estableciendo un enfoque equilibrado. Asimismo, la supervisión parental activa se convierte en un mecanismo vital para proteger a los niños de posibles peligros en línea y garantizar que su experiencia con la tecnología sea segura y enriquecedora. De esta forma, los progenitores podrán monitorizar el tipo de contenido al que tienen acceso sus hijos
Pero, no sería suficiente con la prevención, sino que es indispensable la educación frente al uso responsable de la tecnología. La enseñanza de habilidades críticas para evaluar el contenido online contribuye a fortalecer la capacidad de los niños para enfrentar estos desafíos de manera proactiva. Junto con ello, la comunicación abierta y continua con los hijos es esencial para abordar los desafíos que puedan surgir.
En resumen, mientras que los dispositivos móviles ofrecen oportunidades valiosas, es crucial reconocer y abordar los riesgos asociados. La gestión consciente por parte de los padres, mediante el establecimiento de límites y una supervisión activa, se presenta como la clave para equilibrar el uso de estos dispositivos y garantizar un entorno seguro y saludable para el desarrollo de los niños.
Cómo equilibrar el uso
Junto con las recomendaciones anteriores, para garantizar que se haga un uso equilibrado y responsable de los dispositivos electrónicos, es necesario que se implementen una serie de estrategias sólidas, veamos algunas:
- Crear espacios sin tecnología: Establecer áreas libres de tecnología en el hogar, como zonas para comer y dormir o jugar, ayuda a preservar momentos importantes sin distracciones digitales. Esto contribuye a la calidad del tiempo en familia y promueve la desconexión cuando es necesario.
- Fomentar actividades sin pantallas: Equilibrar el tiempo de pantalla con actividades fuera de ella es esencial para un desarrollo saludable. Incentivar juegos al aire libre, la lectura de libros físicos y la participación en actividades creativas y sociales diversifica y proporciona gran valor a las experiencias de los niños. De esta forma será más sencillo poner límites en el tiempo de conexión, ya que seguiremos una rutina de actividades, por lo que tendrá un inicio y un final.
- Seleccionar juntos el contenido: Involucrarse activamente en las experiencias digitales de los niños permite a los padres comprender mejor sus actividades en línea y guiar su comportamiento. Acompañarlos en la exploración de aplicaciones educativas y juegos digitales apropiados para su edad proporciona oportunidades de aprendizaje conjunto y contribuye al desarrollo positivo, al tiempo que reduce el riesgo de exposición a material inapropiado y genera una comunicación abierta entre los padres y los menores.
- Involucrar a los niños en la creación de reglas: es indispensable establecer límites tanto en el tiempo de uso como en el acceso a la información. Permitir que los niños participen en la creación de reglas relacionadas con el uso de dispositivos móviles, aumenta su sentido de responsabilidad y la comprensión de los límites establecidos.
El Papel de la educación en la seguridad digital
Para poder navegar con seguridad, es indispensable que, en edades tempranas, los padres establezcan una serie de límites. Sin embargo, posteriormente tendrán que ser los propios niños quienes tengan las herramientas necesarias para identificar y protegerse contra amenazas como ciberacoso, fraudes en línea y comportamientos inapropiados. Se les ha de educar sobre la importancia de no compartir información personal en línea y cómo configurar ajustes de privacidad, promoviendo habilidades de autoprotección esenciales para su seguridad digital. Además, se debe Fomentar la conciencia sobre comportamientos seguros, como la verificación de la autenticidad de las fuentes en línea y la comprensión de las consecuencias de compartir información sensible.
Algunos ejemplos de programas que permiten llevar a cabo esta labor de una manera más lúdica son: NetSmartzKids que ofrece vídeos y juegos educativos para enseñar sobre seguridad en línea; Common Sense Media ofrece guías para padres y educadores sobre cómo abordar temas de seguridad en línea con los niños, así como reseñas de contenido digital adecuado para cada edad y Family Link que permite conocer el tiempo de uso de pantallas, gestionar las aplicaciones que se usan, bloqueando las inadecuadas según edades y recomendando otras adecuadas.
La combinación de educación en seguridad en línea, el acceso a programas y recursos especializados, y el fomento de la conciencia digital en los menores establece un marco sólido para un uso seguro y responsable de la tecnología. Este enfoque integral capacita a los niños para enfrentar los desafíos en línea y aprovechar las oportunidades de manera positiva y segura.
www.brainsnursery.com
