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Desde que en España apareciera el virus sars-cov-2, se calcula que han sido diagnosticados unos mil cuatrocientos niños de Covid-19, de los cuales una cuarta parte, o sea unos trescientos cincuenta, han precisado ser ingresados en hospitales.

De este virus que ha trastocado todo se sabe que es poco frecuente en niños, dura menos tiempo que en los adultos y es de levedad en casi todos los casos, aunque se siguen haciendo muchos estudios actualmente. También se piensa que este otoño será un grave problema en cuanto a la asistencia de los potenciales numerosos nuevos casos, que se sumarán a las infecciones habituales anuales de este periodo (virus catarrales, gripe, etc…)

Hasta ahora, parece ser que el virus afecta a niños sanos previamente en general, sin defensas bajas, ni patologías inmunes. Y en pediatría se han usado tratamientos sintomáticos y en los casos graves se han estado utilizando antivirales y antipalúdicos. Y también sabemos que muchos casos pueden ser atendidos en consulta, o vía telemática.

Hay que cuidarlos

Este otoño, se recomendará especialmente la vacuna antigripal y del neumococo, adelantada en niños de riesgo, así como la prevención, con valoración por el pediatra, y el uso de los productos que aumenten las defensas del organismo. También se prevé el uso de test Covid de anticuerpos y PCR en casos de duda para diagnóstico diferencial, en especial con los posibles brotes con la vuelta al colegio.

Hemos estado tres meses confinados, y en todos se ha producido una cierta afectación psicológica, nos han quedado miedos e inseguridades y se ha producido un deterioro en el control de la salud, pues con motivo de la alta incidencia se ha abandonado el control sanitario habitual de muchas patologías, y retrasado operaciones y acciones sobre el control de las mismas, por la sobresaturación, así como retraso de las vacunaciones y controles de niños sanos y es posible que en este otoño vuelva a suceder por los rebrotes, así como  aumento de la dificultad para la asistencia presencial en muchas consultas ambulatorias y hospitalarias, ya que contamos con el miedo a acudir a ellas para evitar contagios.

 El contacto social

En los niños, además, hay que tener en cuenta que la falta de socialización, el abandono de las clases y contacto con sus compañeros y amigos, así como a zonas de recreo y actividades habituales de ocio y esparcimiento, es posible que en muchos casos haya dejado una huella importante en su futuro, que debemos preocuparnos tanto familia como profesionales por corregir lo antes posible, y más sin tener claro que es lo que nos va a deparar el futuro.

Desde los tres años la evolución de los niños es muy importante, pues es lo que marca el aprendizaje y la memoria futura social, teniendo en cuenta que en esa época la concepción del paso del tiempo es muy distinta a la del adulto, es mucho más lenta y el aprendizaje social y la atención que necesita prestar el niño a los acontecimientos que suceden a su alrededor es la base de lo que le marcará para el futuro, por ello es muy necesario e importante tener claro, que ese estancamiento social del confinamiento, la evolución de las fases de desescalada, los rebrotes, las noticias, el teletrabajo, el aumento del paro con padre o madre o ambas sin trabajar y preocupados,  la desconexión social, la ausencia de clases; en fin, el gran cambio que se ha producido desde marzo de 2020, y el que se prevé haya hasta dentro de mucho tiempo o quizás ya para siempre, al menos en algunos aspectos de la vida, aunque confiemos y esperemos se  clarifique y se solucione lo mejor posible, eso sí, sin descuidarnos.

 ¿Qué nos depara el futuro?

En otoño vuelven los colegios, las clases, los compañeros, profesores, mezcla de nuevo, y con cantidad de rebrotes de la pandemia. Es una tarea desconocida tanto en medidas a tomar como consecuencias previsibles, aún se usará el causa-efecto, y casi todo está por estudiar.

¿Qué nos deparara el futuro? confiamos muchísimo en el desarrollo de una vacuna definitiva que nos ayude, aún queda bastante tiempo. Lo que está claro que debemos seguir haciendo es mantener la educación familiar y social en higiene, evitar desplazamientos  y celebraciones innecesarias y uso de mascarilla desde lo antes posible y confiar en nuestra sanidad y en los expertos.

Dr. FRANCISCO POZO PRIEGO Cº 282843686. Director Médico Policlinica Longares. www.policlinicalongares.es


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