El faláfel es la croqueta vegetariana por excelencia. De origen incierto (se cree que fue en la India) se comen sólas, acompañadas de salsa de menta o tahini o también en bocadillo utilizando pan de pita. Se preparan utilizando garbanzos o habas crudos remojados (NUNCA cocidos). Los egipcios preparan el faláfel sólo con habas. Yo voy a preparar el que es sólo de garbanzos. El acompañamiento estrella es la salsa de yogur y menta, aunque en muchas zonas de marruecos se acompaña de salsa taratur (a base de tahina y zumo de limón).
Ingredientes (para unos 12 faláfel):
– 200g de garbanzos secos
– 2 cucharadas grandes de cilantro picado
– 1 cucharada grande de perejil picado
– 1 cebolla
– 1 diente de ajo
– 1 cucharaditas de comino molido
– 1 cucharadita de Ras-el-Hanut ( una mezcla de especias marroquí que lleva: pimienta negra, comino, cardamomo, nuez moscada, canela, pimentón y jengibre)
– 1/2 cucharadita de impulsor (Royal©)
– 1 cucharadita de sal
– Harina de garbanzos
(para la Raita de Menta):
– 1 yogur azucarado (o natural con una cucharadita de azúcar)
– 2 cucharadas de menta o hierbabuena picada
– 2 cucharadas de zumo de limón
– Sal y pimienta al gusto
– 1/4 de cebolla picada muy finita (opcional)
Preparación:
La noche de antes poner a remojo los garbanzos con agua suficiente para que dupliquen volúmen. Tapar y dejar toda la noche.
Para preparar el faláfel triturar los garbanzos con la picadora hasta conseguir una consistencia arenosa. (Esto va un poco en gustos, a mi me gusta el faláfel más con trocitos que completamente triturado).
Pasar a una fuente. En la misma picadora poner la cebolla, el impulsor, el ajo, la sal y las especias, el cilantro y el perejil.
Triturar hasta conseguir una mezcla homogénea. Añadir esta mezcla a los garbanzos triturados. Mezclar con la mano hasta conseguir unificar todos los ingredientes.
Meter en la nevera y dejar reposar mínimo media hora para que se integren los sabores y la masa asiente.
Mientras, preparar la raita. Poner en un cuenco el yogur y batirlo hasta que quede cremoso, añadir los demás ingredientes y mezclar bien. A mi personalmente me gusta machacar parte de la menta en el mortero y añadírsela así para un extra de sabor y color.
Sacar la pasta del faláfel de la nevera y empezar a formarlos. Si la masa se desmorona o es dificil formar la bolita porque el garbanzo ha soltado mucha agua al triturarlo añadir una o dos cucharadas de harina de garbanzo para compactar un poco la mezcla. Formar bolitas del tamaño de una nuez y luego aplanarlas hasta obtener discos gorditos.
Freír en abundante aceite unos 2 o 3 minutos por cada lado hasta que estén bien doraditas.
Servir templadas acompañadas de la salsa de yogur y menta.
O también con un fantástico pan de pita casero en forma de bocadillo!
http://lacocinadeloselfos.blogspot.com.es/2013/05/falafel-croquetas-de-garbanzos-con.html#.WcItCshJbDc