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Ya está aquí el otoño, y con él llega la caída de cabello y los problemas en las uñas, que tanto te avergüenza mostrar. Es un proceso que se inicia en la primavera, y cuando termina el ciclo de tres meses, el cabello empieza a caer para renovarse. Cada vez que te cepillas el pelo aumenta tu preocupación. Ahora es tiempo de cuidarte.

Las uñas, al igual que el cabello, se regeneran,  y sus alteraciones nos indican que algo no va bien. Las causas de tener unas uñas quebradizas y un pelo que se caiga en exceso son muy variadas. El estrés, la ansiedad, el estrés post-vacacional, puede influir en que aumente la caída de cabello o que nuestras uñas no presenten el mejor aspecto.

Agresiones al pelo

Nos pasamos gran parte de nuestro tiempo agrediendo al cabello de las formas más variadas: secadores, planchas, tintes, decoloraciones, coletas tirantes, exposición al sol, todo ello hace que nuestro pelo esté mucho más frágil, se caiga más y tenga peor color y brillo.

No sólo sufre el pelo por nuestro ‘mal’ trato, sino que también algunas enfermedades (tiroides, anemia, infecciones …), incluso el embarazo, altera nuestro ciclo de renovación y hacen que el cabello se caiga con más facilidad.

Y las uñas también

Las uñas también sufren con la falta de cuidado por nuestra parte, la falta de algunos nutrientes puede afectar la dureza de la uña; la falta de hidratación es otro punto negro para esa parte de nuestro cuerpo.

Aunque creamos que no, una mala alimentación, ejerce un efecto negativo tanto sobre el cabello, como sobre las uñas, pero a estas últimas, la utilización de detergentes o productos de limpieza fuertes en contacto diario con nuestras manos van a debilitar, y mucho, nuestras uñas.

Buscando soluciones

La mejor solución son las vitaminas y los minerales. Van a frenar el deterioro de nuestro pelo y uñas. Vitamina B, C, A, D y E, tienen que estar en nuestra dieta, El Zinc, que asegura el cremento, y el Cobre, para ganar color, también van a ayudar.

El agua será otro aliado, porque hay que consumir suficiente agua. Usa guantes cuando realices tareas domésticas que supongan la utilización de productos como detergentes, lejías, etc.

Utiliza una buena crema hidratante para la uñas y productos no agresivos para el lavado del cabello. Evita exponer al calor el pelo.

Y, por último, hay productos que te ayudan, con una composición específica, para fortalecer el cabello y las uñas

Bebé y mujer


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