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Seguro que si fumas en algún momento te has plantado dejarlo y no lo has conseguido. No te desanimes, en el próximo intento lo consiguirás. Para que te motives, te vamos a contar cómo puedes dejar de fumar.

Dejar de fumar es una decisión excelente para la salud de uno mismo y la de los de tu alrededor. Los beneficios son infinitamente mayores a los efectos secundarios que pueda ocasionar.

En España el número de fumadores descendió al 22% de la población, la cifra más baja de los últimos 30 años, según la Encuesta Nacional de Salud 2017 del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Eso sí, la caída se produce a un ritmo cada vez más lento.

Los datos son estremecedores, el 25% de la población española sigue fumando. Según el Observatorio de la Asociación Española de Lucha contra el Cáncer AECC “el tabaco es la segunda sustancia psicoactiva más extendida en la población. Ocasiona más de 50 mil muertes al año y representa el 13% del total de muertes anuales”. Y Añade, “El tabaco es uno de los mayores problemas de salud pública al que se ha tenido que enfrentar la humanidad. Mata hasta a la mitad de sus consumidores, más de 7 millones de personas al año, de las cuales más de 6 millones son consumidores directos y alrededor de 890 000 son no fumadores expuestos al humo ajeno lo que todo el mundo conoce como fumador pasivo”.

Pasa a la acción

Dejar de fumar es posible, aunque los fumadores vean casi imposible poder conseguirlo. Lo mejor es ponerse en manos de profesionales que nos van a ayudar en los distintos aspectos que intervienen en el proceso.

En los últimos años en España el número de fumadores ha ido disminuyendo, especialmente a partir de la promulgación de la Ley Antitabaco. Cada vez son más los que tienen ganas de apartarse de un hábito que les crea problemas de todo tipo. Según los datos del Eurobarómetro sobre consumo de tabaco (junio de 2015), “un 32% de los fumadores diarios ha realizado al menos un intento de dejar de fumar en los últimos 12 meses,

Uno de los temidos efectos secundarios es engordar, cuando se abandona el hábito de fumar el cuerpo experimenta diferentes cambios psicológicos y fisiológicos que pueden derivar a un aumento de peso en un amplio porcentaje de casos, según nos explican los dietistas y nutricionistas del equipo multidisciplinar que atiende este tipo de casos en la Clínica Opción Médica.

Hay varios motivos por los que se suele engordar al dejar el tabaco, pero el causante principal es la nicotina, que conlleva a un estado de continua alteración metabólica. Por lo tanto, es muy fácil engordar una vez se abandona el tabaco, pero este aumento de peso puede evitarse siguiendo los consejos que nos cuentan los profesionales de Clínica Opción Médica.

Respecto a la alimentación, la mejor manera de evitar engordar al dejar de fumar es llevar un control de la dieta. Hay que intentar reducir la ansiedad y la tentación de recurrir a la comida grasa y rica en azúcares y sustituirlo por caprichos saludables. Además, siempre se recomiendan cinco comidas, es mejor comer con más frecuencia y menor cantidad.

Después de seguir todos los consejos que te damos para abandonar el mal hábito del tabaco, si lo consigues, con ayuda profesional o sin ella, te sentirás totalmente libre, y verás la vida de otra manera, porque sí se puede salir del tabaquismo.

Cuando se abandona el hábito de fumar el cuerpo experimenta diferentes cambios psicológicos y fisiológicos que pueden derivar a un aumento de peso

Por esto engordas

Los dietistas y nutricionistas de la Clínica Opción Médica nos describen las acciones que la nicotina produce en el organismo, tanto sobre el sistema digestivo, como el nerviosos y el cardiovascular.

  • La nicotina actúa como un estimulante a nivel del sistema nervioso. Este efecto provoca que aumente el metabolismo basal y la temperatura, hecho que hace que se quemen más calorías extras.
  • Aumenta la sensación de saciedad y placer.
  • La nicotina produce adicción, por eso decimos que actúa en el cerebro de una forma parecida a la del azúcar. En ausencia de ésta se produce el síndrome de abstinencia con ansiedad,
  • A nivel digestivo también provoca alteraciones, estimula el aumento de los jugos gástricos y una disminución de los movimientos musculares del sistema digestivo, produciendo una mala eficacia digestiva y un menor aprovechamiento de los alimentos.
  • Asimismo, reduce las secreciones de la vesícula biliar y disminuye aún más la eficacia en la asimilación de los alimentos.
  • No podemos obviar la disminución de la capacidad olfativa y gustativa que provoca, hecho que induce a que los alimentos resulten menos atractivos.
  • Produce una flora intestinal de peor calidad, lo cual influye sobre la creación de algunos metabolitos importantes para nuestra fisiología.

Hay que intentar reducir la ansiedad y la tentación y recurrir a los caprichos sanos

Efecto sobre el organismo

Al dejar el tabaco y reducir los niveles de nicotina se producen los siguientes efectos sobre el organismo:

  • La temperatura corporal baja y el metabolismo basal se ralentiza, por lo tanto, dejamos de quemar calorías extra.
  • Aumenta la ansiedad y el cuerpo necesita tratarla con algún equivalente como azúcares o grasas.
  • El aparato digestivo vuelve a funcionar como debe y optimiza el aprovechamiento calórico.
  • La vesícula biliar también aprovecha mejor las grasas ingeridas.
  • Reaparece la capacidad olfativa y gustativa que convierte la comida en más atractiva.
  • La flora intestinal tarda en recuperarse y sigue un tiempo sin producir algunos productos vitales que podrían ayudar a regular nos niveles de azúcar y colesterol en sangre.

Eliminar de tu vida el tabaco tiene más beneficios que efectos secundarios pueda ocasionar

Consejos para escapar del cigarrillo

  • En esta etapa, el cuerpo pedirá azúcares para sustituir la nicotina, nunca debemos darle dulces ni bebidas azucaradas, podemos optar por comer más pan o arroz, siempre integral. La fruta, además de reforzar el sistema inmune (igual que la verdura), es un buen sustituto para calmar esta sensación de hambre o ansiedad.
  • El agua o las infusiones también ayudan a mantener la sensación de saciedad y evitan comer compulsivamente, además tienen efectos diuréticos, que benefician el buen funcionamiento de los riñones.
  • Tomar lácteos desnatados, al menos una vez al día, puede ayudar a mejorar la flora intestinal. Otro apoyo puede ser tomar proteínas de calidad, en las legumbres la proteína vegetal es de excelente calidad y tienen alto poder saciante, pero en la carne y el pescado hay que ir con cuidado, debe optarse por pescado azul, pavo, pollo o jamón.
  • La proporción de café o el té debe bajar ya que son estimulantes de la creación de cortisol y, por lo tanto, pueden causar mayor ansiedad y necesidad de tabaco, que el cuerpo sustituirá por comida.
  • Para no engordar al dejar de fumar también es fundamental el ejercicio, ayuda a perder peso y a liberar endorfinas, descargar tensiones y calmar la ansiedad. El ejercicio debe ser aeróbico, una hora al día entre semana es lo ideal.
  • Otro punto importante a tener en cuenta es pensar en sustituir esos cigarrillos clave como el del café de la mañana o después de comer por otros hábitos atractivos y saludables.

El cuerpo pedirá azúcares para sustituir la nicotina, huye de darle dulces ni bebidas azucaradas

Efectos sin tabaco

  • A las 24 horas de dejar de fumar se elimina completamente el monóxido de carbono que se tenga en el organismo y los pulmones empiezan a descargar los residuos de tabaco que acumulaban.
  • Al año de dejar el tabaco el riesgo de enfermedad cardiovascular se reduce a la mitad.
  • Mejora la fertilidad
  • Se consigue que la piel tenga jun aspecto más saludable
  • El pelo cobra otra vida, más brillante y suave.
  • El aliento es mucho más fresco
  • Eliminas la ansiedad de tener que salir de los sitios para fumar

Bebé y mujer


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